En España vive mejor el parásito que el que trabaja y ahorra

Con el titular considero que “se dice todo de la España actual”; aquí se ha extendido una terrible enfermedad, que acabará con todo si los que gobiernan no se preocupan de corregir el enorme hundimiento y procuran legislar para que el que de verdad produce y ahorra, viva como le corresponde y no como lo está haciendo en la actualidad. No exagero en absoluto, mire, vea, observe lo que ocurre a su alrededor y clasifique usted mismo, a las personas que usted conozca y sepa de qué viven y cómo viven, unos y otros y la situación en que se encuentran.
Una muestra del desastre, la tenemos en mi mismo municipio, Jaén, que cuenta con unos 115.000 h. y del que el pasado año y como viene ocurriendo ya hace unos cuantos, ha bajado de población, cada vez hay más negocios cerrados y se sostiene, en gran medida por cuanto es una ciudad “funcionarial” y por tanto poblada de infinidad de empleados públicos, que mal que bien, cobran todos los meses y ese peso sostiene bastante “los cimientos de la misma”; pero la penuria es tan grande que de aquí huyen los mejores y como desde tiempos atrás, van a la emigración en busca de lo que aquí no encuentran por más que buscan; o sea “un medio decente para poder vivir del propio trabajo”. Este municipio y políticamente ha sido tan saqueado (lo sigue siendo) que han logrado entre todos los políticos que lo han mangoneado, que sea una de las dos o tres capitales más endeudadas de las de toda España; la que peores y más caros servicios presta, en contrapartida a los altos impuestos que nos cobra por ellos. Tan es así que está en quiebra y sobre cargada de parásitos, sueldos altos que no puede costear y sigue malgastando dinero que no tiene; puesto que por lo visto el Estado y como vigilante máximo de desmanes, le importa un pito la marcha de una de sus ciudades y los deja hacer sin intervención alguna.
Como administradores, cuenta con “una plantilla” de 27 concejales (cantidad excesiva por demás) incluido el alcalde, que recién llegado “al desastre”, se pone un sueldo de unos setenta mil euros anuales; el resto de concejales cobran sustanciosos sueldos; incluso los que no se dedican exclusivamente al cometido de edil, pero aún estos “que se dicen no liberados” (“no entiendo eso de liberación salvo si lo aplico a la mejora notable de vida salarial que perciben”) que según Viva Jaén (periódico local) perciben alrededor o más de tres mil quinientos euros mensuales, salario “altísimo en estos andurriales”, donde el que tiene la suerte de trabajar, cobra mil o poco más. Aumentemos a ello “el regimiento” de asesores o simples enchufados al ayuntamiento, por el dedo político de cada cual; y terminemos diciendo que aquí un municipal o guardia urbano o un bombero, ganan bastante más que un policía o guardia civil, que “han de sudar el uniforme, muchas veces con el riesgo de su vida”; a pesar de ello, a estos locales, también les han comprado chalecos anti balas; o sea y concretando, que tenemos una ciudad con servicios de séptima categoría, pero los que dicen servirla, se pusieron sueldos de “primera o segunda categoría”; además… ¿De verdad, necesitamos tanto personal aquí, cuando no hace mucho, eran la cuarta o quinta parte y aquí siempre han ido las cosas tranquilas y sin catástrofes notables; no lo entiendo ni nadie de mi edad lo entiende, por cuanto de abandono hay en casi todo. Eso sí, “los 27 del pleno municipal, siempre están a la gresca, pero no se nota ni han notado mejoras en nada, por lo que es deducible que como los bizantinos, se pelean por saber si los ángeles son macho o hembra”; pero nadie plantea el desastre de una notoria y ruinosa administración municipal, que descalifica a todos los ediles de los últimos cuarenta años. Las décadas anteriores no es que brillaran mucho, pero al menos, nos cobraban “cuatro perras” de impuestos y ahora podemos valorar, que para lo poco que pagábamos, recibíamos mejores servicios.
Si nos pasamos del último estamento político cual es el municipio y entramos en el primero (el parlamento nacional) ocurre ahora y es que: “han comprado 490 “Ipad” (372.032 €) y 699 nuevos ordenadores (455.570 €) y por cuanto “los padrastros de la patria, salientes; simplemente y a cara de perro se los han llevado “robados”. ¿No sería de lógica el que se los cobrasen vía judicial… por qué estos artilugios no se los pagan ellos de su bolsillo, es que hay que pagarles hasta… “las compresas y condones”? Por otra parte, ahora son electos pero no hay ni parlamento ni
actividad alguna… ¿a pesar de ello hay que pagarles sueldos y demás prebendas y sinecuras?
En España y si se busca concienzudamente, se podría encontrar hasta el enchufe mejor de todos y que se cuenta en forma de chiste, cuál era el de “jesusero”; del que incluso presumía la madre del parásito, ya que comentaba con orgullo lo siguiente. Mi hijo si que ha logrado un enchufe buenísimo; le pagan una buena mensualidad y no hace apenas nada, está de jesusero en el obispado. ¿Y cuál es su trabajo? Ir siempre al lado del obispo y cuando éste estornuda, decir… “Jesús”; terminó diciendo aquella madre, que como es habitual aquí en el decir de muchos padres de parásitos, “su vástago gana mucho y no da golpe”, lo que en vez de causar vergüenza en este tipo de progenitores, lo suelen vocear con orgullo deleznable.
Y esta es la España “cañí” o la que vive o trata de vivir de la infinidad de cuentos con que se ha vivido y aún muchos viven aquí.

Antonio García Fuentes
(Escritor y filósofo)
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