El Estado como enemigo público número uno

Cuando el aparato estatal se llena de políticos bandidos y estos se alían con los bandidos de fuera, el destino del pueblo es terminar siendo siervo o esclavo de esa plaga, la que ya se ha apropiado de todas las fuerzas estatales y dictando leyes draconianas, termina por arruinar de tal forma a la población que acaba con todos los bienes del Estado, incluso con los particulares; de ahí mi advertencia con la siguiente síntesis: “La política es algo demasiado importante para dejarla solamente en manos de los políticos”; no es que la misma no diga lo que muchos otros han dicho en el pasado, pero hoy, el poder político cuenta con unos medios de control tan perfectos que o son controlados conjuntamente o el final será horrible, puesto que el súbdito (que no ciudadano a lo que nunca ha llegado) solo le dejan las migajas para que no se muera de inanición y en muchos casos ni eso, de ahí el que cada vez muera más gente en la calle y peor que “un perro abandonado”. Traigo a colación otro aviso intelectual, este el de una mujer que lo escribió en el pasado siglo.
"Cuando advierta que para producir necesita obtener autorización de quienes no producen nada; cuando compruebe que el dinero fluye hacia quienes trafican, no bienes, sino favores; cuando perciba que muchos se hacen ricos por el soborno y por influencias más que por el trabajo y que las leyes no lo protegen contra ellos, sino, por el contrario, son ellos los que están protegidos contra usted; cuando repare que la corrupción es recompensada y la honradez se convierte en un auto-sacrificio, entonces podrá afirmar sin temor a equivocarse, que su sociedad está condenada." Ayn Rand (1950).
Miles de años antes y en la antigua China, su sabiduría escribió la maravillosa máxima que sigue: “Cuando cada ciudadano cuente como parte de la sociedad, y la sociedad pertenezca a todos por igual, los virtuosos y capaces serán elegidos para la acción pública. Los adultos dedicarán sus esfuerzos a las tareas usuales y la infancia será educada correctamente. Todos participarán en la responsabilidad social. Los recursos naturales serán utilizados para el bien común y no serán usurpados con fines egoístas. La gente procurará aplicar su habilidad en provecho público antes que en ganancias privadas. Será la Era del Gran Estado de Paz y Prosperidad”.
¿Qué está ocurriendo hoy? Simplemente mire a su alrededor, observe y juzgue como nos tienen y hacia dónde nos llevan. Y si no toma conciencia y obra como debe no se queje de nada, en mi tierra hay una sentencia brutal para definir ello… “Quien nace lechón muere cochino (marrano)”
En España los abusos del Estado son ya tan tremendos que se llega a situaciones, como la que reflejo a continuación y que ya es el colmo de lo imaginable y además se produce en Andalucía, que es la región de las más empobrecidas de toda Europa… “Los padres de Alejandro emigraron a Alemania en los años 60. Estuvieron 20 años trabajando allí y a su regreso a Arcos de la Frontera (Cádiz) montaron un hostal para ganarse la vida. Al fallecer el padre de familia Alejandro recibió su parte de la herencia, ya que sus padres se habían casado en régimen de bienes gananciales. Ahora la Junta de Andalucía le reclama 280.000 euros de impuestos de sucesiones, cantidad que cuando fallezca su madre será el doble. [Tienes que estar registrado y conectado para ver este vínculo]
Aquí los impuestos ya son confiscatorios y los que dicen gobernar España, nos cargan ya tantos impuestos, que ya sólo les falta obligarnos s tener “un contador de oxígeno” para cobrarnos por este consumo que se produce de forma natural y que es la base de la vida en este planeta.
Los políticos no sirven para nada verdaderamente útil, sólo se preocupan de su medro y de “trincar” cuanto más mejor; y de entretenernos con los mil espectáculos para masas que ya son empleados como la más idiotas de las drogas; no hay estadistas ni ideas constructivas para una humanidad mejor. Por ello las definiciones no tienen sentido, puesto que la realidad es la que digo.
Por todo ello: "Ser de la izquierda es, como ser de la derecha, una de las infinitas maneras que el hombre puede elegir para ser un imbécil. (J. Ortega y Gasset). YO LE AÑADO: El sistema de gobierno no es el malo, los malos son los que lo manejan con arreglo a sus perversos instintos, por tanto el nombre no dice nada en sí. En cuanto a quién me asigne militancia en alguno, le señalo como bastante bruto, puesto que el inteligente que lea mi producción, lo que puede decir es simplemente lo que es mi realidad; "YO SOY MI PARTIDO Y MI CIRCUNSTANCIA"; NO HE VENDIDO MI PENSAMIENTO A NADIE, NI A MÍ MISMO. Claro que para llegar a ese punto hay que tener un caletre que pocos llegan a tener.

Antonio García Fuentes
(Escritor y filósofo)
[Tienes que estar registrado y conectado para ver este vínculo] (aquí mucho más) y
[Tienes que estar registrado y conectado para ver este vínculo]