Si bien y en general el coqueteo es un comportamiento que no causa daño, la coquetería parece ser un problema en la mayoría de las relaciones. La gente lo encuentra ofensivo e irrespetuoso y también sienten que lleva a la gente a sentirse celosa.

Existen maneras de manejar la actitud coqueta de la pareja sin necesidad de terminar una relación o de discutir regularmente, mediante la comprensión de las razones y significados que están detrás de esa pareja coqueta, según lo anota Alina Ruigrok, (Los Ángeles, California) una experta profesional en relaciones humanas, autora de muchos artículos relacionados con estos temas.

Si bien lo que quisiéramos es que nuestra pareja no coquetee en lo absoluto, ese es un deseo pero no necesariamente lo vamos a conseguir.

“Todos queremos sentirnos especiales y como si fuéramos la única persona en la que nuestro amorcito ha puesto sus ojos, pero la verdad es que los ojos de nuestra pareja tienen derecho a explorar lo que les rodea, al igual que nosotros".


No tiene los mismos derechos que los hombres
Estar en una relación nunca significa que nuestra pareja nos pertenece o que la podemos cambiar, y por ello es esencial estudiar la personalidad, actitudes y hábitos de una pareja durante el proceso de enamoramiento y antes de decidir que la relación se convierta en algo oficial”, sugiere esta profesional.

Sin embargo, Ruigrok considera que lo más importante es enfocarse en las razones que hay detrás de ese coqueteo de la pareja. Dice la experta que pudiera tan solo ser que tiene una elevada autoestima y que expresa esa autoconfianza a través del coqueteo, como muchas otras personas lo hacen.

“Si este fuera el caso, entonces es probable que usted ya se haya dado cuenta de esa autoconfianza excesiva de su pareja al conocerla, pero que le empezó a incomodar cada vez más mientras iba progresando el sentimiento de cercanía entre los dos.

En estos casos, lo mejor es analizar la propia autoconfianza para prevenir la inseguridad y aprender a aceptar la personalidad de la pareja”, dice la autora.

Pero también pudiera ser que ese coqueteo tenga un significado más profundo, que vaya más allá de una alta autoestima. Desafortunadamente, algunas veces la gente coquetea porque se siente en verdad atraída hacia otras personas y eso pudiera dar como resultado un gran daño a la relación, dependiendo de cuánto moleste. “Sentirse atraídos hacia otras personas no significa necesariamente que la pareja quiera separarse y cometer una traición. Sentirse atraídos hacia otros pudiera significar que se esté simplemente reconociendo su buena apariencia y cualidades y nada más. La atracción no siempre crea la tentación de traicionar a la pareja y todos deberíamos estar en condiciones de permitirnos esa seguridad en nosotros mismos y en que somos capaces de atraer el amor incondicional de alguien”, dice Ruigrok.

Un buen consejo

Si ese coqueteo le molesta al punto de no querer continuar con la relación, porque incluye un comportamiento que usted no está dispuesto a aceptar, entonces lo mejor que se puede hacer es discutir el tema directamente con la pareja. Mantener una discusión honesta y abierta será la mejor forma de resolverlo en lugar de enfurecernos, y llenarnos de rabia y de otros sentimientos negativos que vamos acumulando y que estallarán más tarde en el camino cuando hayamos alcanzado el límite de nuestra paciencia. “Dígale a su pareja que se siente irrespetado y herido cuando pone demasiada atención en otra persona. Preguntarles por qué sienten esa necesidad de coquetear también permitirá visualizar la película más claramente si se obtiene una respuesta clara de su parte, por supuesto. Sin dar a su pareja un ultimátum, dígale que usted ha tratado de adaptarse a ese comportamiento pero que definitivamente no puede hacerlo y que, por lo tanto, lo mejor será ponerse de acuerdo en este punto antes de continuar adelante con la relación”, según la experta.

Lo óptimo es enseñar a los demás cómo queremos ser tratados dentro de una relación, pues si se mantiene silencio sobre lo que nos molesta, como el coqueteo, entonces lo único que sacaremos es hacernos daños y hacer daño a la pareja, porque no se ha logrado, mediante la sinceridad, experimentar una relación que ambos merecen. Es un obligación, dice Ruigrok, que siempre seamos honestos con nosotros mismos y con nuestra pareja con relación a los sentimientos y los pensamientos. En ocasiones, quizás no consigamos los resultados esperados, quizás nuestra pareja nunca deje de coquetear con otras personas, pero a pesar de que no podemos cambiar la personalidad y los hábitos de la pareja sí podemos cambiar una situación que nos causa infelicidad.

Al convertirse en una persona comprometida con la relación, su pareja debería siempre preocuparse por sus sentimientos y pensar en cómo mejorar todo lo que interfiere en la relación. No debería jamás querer continuar haciendo algo que le haga a usted sentirse mal, desencantado, celoso o inseguro. Si bien la pareja no puede cambiar, sí puede demostrar interés en exhibir lo que siente por usted y hacer sus mejores esfuerzos para que usted se sienta mejor. Si se niega a cambiar o a intentar disminuir ese coqueteo innato, entonces quizás habrá llegado el momento de repensar si esta relación es lo que más le conviene.

Manejar la relación con una pareja coqueta puede ser fácil o puede ser extremadamente estresante y dañino para su autoestima. Todo depende de su personalidad. Para determinar lo que es mejor para usted, debe ponerse en contacto con su yo interior y hacerse las preguntas necesarias para poder encontrar las mejores respuestas. Si usted no quiere perder a su pareja pero le disgusta el coqueteo, entonces necesita escoger entre aprender a aceptar esa parte de su personalidad o salir de la relación y encontrar a alguien que no despertará sus celos y su inseguridad.