CORREOS: AYER… Y HOY COMO LOS CANGREJOS

Pertenecer al “Cuerpo de Correos” aquí en España era un honor; fueron un cuerpo de esforzados trabajadores, sobre todo los carteros en contacto con el público, los que te llevaban a casa puntualmente, desde el periódico que recibías de fuera, pasando por el dinero del “giro postal” y la carta ordinaria o certificada, que desde dentro o fuera de tu ciudad te era enviada. Jamás se perdía un sobre, incluso los que no señalaban la dirección con claridad, en Correos se gestionaba y generalmente era entregada en destino a la mayor brevedad. El reparto era diario y aquellos hombres (entonces no había mujeres carteras) cargados con aquellos enormes “carterones de cuero”, hacían el reparto cada día, hasta que era repartido todo él; o sea que si había menos pues menos horas y si había más, había que terminarlo. Un correo ordinario, tardaba 24 horas desde Madrid a cualquier lugar de España y de “extremo a extremo”, la tardanza eran como máximo 48 horas (estoy hablando de cuando las locomotoras funcionaban con carbón de piedra); si antes de las once de la mañana, dejabas en el buzón de la central de Correos un sobre, podías estar seguro que el receptor del mismo, si era de la misma localidad, lo recibía en el día. Había un servicio postal de paquetes, económico y muy eficaz, los periódicos y los libros circulaban con tarifas exiguas, la correspondencia para ciegos era gratuita, etc. etc.; en resumidas cuentas, en España, Correos del Estado, funcionaba mejor que bien y a satisfacción de todos.
¿Qué queda de todo ello? Una decadencia atroz; desde sobres que se pierden y no llegan (en mi caso tengo muchas veces que ir a las oficinas del suministrador del agua o la electricidad a recabar facturas que no he recibido y que allí dicen haber enviado) a tardanzas enormes en la entrega, pasando por cobrar precios ya abusivos por un en general, peor servicio cada día, etc. etc. etc. ¿Qué ha ocurrido en estos tiempos de progreso tras fenecer el anterior sistema de gobierno? Veamos algunas muestras:
“Cartas para Jaén desde Granada”: CARTAS: El correo que se genera en la capital y provincia se envía al centro logístico de Granada (200 km. entre ida y vuelta) y se devuelve. EMPLEO: En el centro de Tratamiento Postal de Jaén, se ha pasado de setenta a solo diez trabajadores. RETRASOS: El desmantelamiento del Centro de Jaén y la merma de la plantilla originan retrasos de entregas”. En la provincia de Jaén, en la actualidad hay 500 trabajadores, frente a los 650 de hace sólo cinco años”. En zonas rurales donde antes había dos, ahora sólo queda uno”.
Lo que antecede y mucho más, lo pueden leer en la página tres del diario “VivaJaén” del día seis de octubre; donde detallan muchas cosas más, e incluso aparece el gran edificio que en la época anterior fue construido para la sede de Correos de España, y el que afortunadamente… “aún no han vendido la parte que debe sobrar ya después de tantos desalojos… pero puede que esté en estudio”; puesto que aquí, todo lo interesante, lo privatizan en beneficio de las nubes de buitres, que nos están explotando sin consideración alguna, y es por lo que tantos bienes estatales que nunca debieron ser privatizados, lo fueron sin consideración alguna; y entre ellos LA CAJA POSTAL DE AHORROS; anexa a Correos y la que contaba con oficinas en todas las poblaciones de España, siendo por tanto el servicio de ahorro mejor organizado (entre otras cosas) de toda la banca y cajas de ahorros españoles… “pero ya digo, había que entregarlo a los buitres que esperaban todas esas bicocas y regalías, creadas o consolidadas en la tan criticada época de Franco”… “cosas veredes Sancho… que dijera aquel hidalgo loco que protagoniza El Quijote”.
Vemos y comprobamos ya sin sorprendernos de nada, a donde nos han ido llevando, estos “progresistas” que de lo único que se preocuparon es de progresar ellos, los suyos y los que en la sombra los animan a proseguir, en esta decadencia ya atroz en esta España, que si hoy se sostiene “en marcha lenta”, es debido a la descomunal deuda pública, que los inútiles gobernantes nos han echado encima a los que habremos de pagarla algún año de algún siglo venidero. O sea nosotros, la masa de españoles, que indefensos de todo y ante todos, vemos impotentes como la vida se nos hace más difícil cada día que pasa… mientras y por ejemplo, este año, se consumen cantidades de dinero ingentes e igualmente ingente tiempo, en propagandas electorales, que ya nadie escucha y simplemente aprieta los dientes puesto que otra solución no nos dejan… “lástima de esta España incompleta y que por cómo vamos, o mejor dicho nos llevan, no se consolidará en otros cuantos siglos, sencillamente porque no interesa a los que hacen su vida y sus capitales, de los despojos de la que es nada menos, que la nación política primera que se conforma como tal en toda Europa y en casi todo el mundo; puesto que salvo China y Japón, yo no recuerdo otras más antiguas.
¡Y viva España… campeona de no sé cuántos oficios (que no deportes) peloteros! Qué es lo que interesa difundir y fomentar, desde al rey hasta la pléyade de demagogos, que nos obligan a mantener en esta expoliada nación de “naciones” o “madre de estas”. Amén.

Antonio García Fuentes
(Escritor y filósofo)
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