Entre parásitos y ladrones Con el titular se puede catalogar lo que en general está ocurriendo en “el mundo mundial”; y es por lo que todo o casi todo va mal; ya que si los recursos que hoy hay disponibles, se hubiesen empleado bien, la situación no ser

Entre parásitos y ladrones

Con el titular se puede catalogar lo que en general está ocurriendo en “el mundo mundial”; y es por lo que todo o casi todo va mal; ya que si los recursos que hoy hay disponibles, se hubiesen empleado bien, la situación no sería lo calamitosa que ya es en muchos países o lugares de este pobre e indefenso planeta. Ni Venezuela estaría como está, ni Eritrea, Ni siria, ni por descontado mi propio país (España) y dentro de ella mi propia ciudad (Jaén) que según el diario que hoy leo, “es por segundo año, la más endeudada de los más de ocho mil municipios con que cuenta España” y con arreglo a su categoría poblacional (diario Ideal 14-09-2016): España en su conjunto ha acumulado una deuda global, que los técnicos la dan por impagable, por lo que solo los intereses que hay que pagar por ella, lastrarán al país por ni se sabe cuánto tiempo.
Mientras los políticos que padecemos que llevan casi un año sin lograr formar gobierno, andan discutiendo “el sexo de los ángeles”, pero cobrando sin hacer nada útil para el país que los mantiene, como parásitos; puesto que si no trabajan no debieran de cobrar y sin embargo lo hacen y con todas “las arrearlas” que ellos mismos se pusieron por cuanto les dio la gana… “y no tienen el mínimo rubor de seguir parasitando el dinero público y menos dimitir e irse todos a freír espárragos, dejando bacante el gobierno para que otros más capacitados traten de arreglar los desastres que nos dejan”.
Ni se les ocurre plantear lo primero que debieran haber planteado hace ya varias décadas; o sea, limpiar al país de parásitos; en mayoría políticos y allegados; nepotes en demasía, concesiones leoninas, a multinacionales o grandes empresas monopolistas que nos explotan por los cuatro costados y arbitrar leyes en definitiva, que propiciaran el reparto de recursos de una mucho mejor forma en que se han venido repartiendo; donde unos “chupan mucho” y otros andan pidiendo limosna; y estos últimos no me refiero al “mendigo profesional”, sino a millones de españoles que perdieron el trabajo o no lo encuentran y llegando a agotar sus recursos, el medio que les queda es “la limosna” de donde venga. O sea; un desastre similar a la terrible posguerra civil, cuyos males económicos, duraron la mitad de la época del general Franco; si bien aquel tan criticado gobernante, en la otra mitad, supo situar a España en la décima economía mundial, en el sentido económico y social.
Sobre lo que digo de abusos; aquí pagamos a precios abusivos, desde la electricidad, hasta la recogida de basuras y desde los impuestos del automóvil, a los de herencias y donaciones; puesto que llegan a quedarse con gran parte de los despojos del que ya ha muerto, por los impuestos que cargan a sus herederos, que obligan a muchos de ellos a renunciar a la herencia… “un corredor o agente dedicado a la compra y venta como intermediario me decía hace días que La Junta de Andalucía, se ha tenido que quedar con muchos miles de “predios” por falta de interés de los herederos de los mismos, ya que los impuesto que había que pagar no les compensan la herencia a recibir.
Los que gobiernan en vez de reducirse sueldos y prebendas (abusivos en mayoría) sólo se les ocurre subir o crear nuevos impuestos; tampoco se atreven a despedir a los excedentes o sobrantes de las muy engordadas plantillas oficiales, por cuanto ello es considerado intocable, debido a “la rebelión de los nepotes” y las consecuencias que traería ello para los partidos políticos; los sindicatos hacen causa común y defienden lo indefendible, por cuanto de seguir la situación como sigue; ni imaginar ya podemos “como va a acabar este desastre que sigue en aumento”.
Detallar casos concretos ya no es necesario; es una plaga nacional y como tal, simplemente entrando en una hemeroteca y leyendo lo publicado (que es una mínima parte) e imaginando el resto; el lector mínimamente inteligente, se dará cuenta que esto está como… “el Titanic cuando empezó a mandar sus primeros S.O.S.”. Esperemos que nos ocurra lo que a aquel barco, cuyos constructores presumieron de que era “insumergible”… Amén.

Antonio García Fuentes
(Escritor y filósofo)
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Entre parásitos y ladrones Con el titular se puede catalogar lo que en general está ocurriendo en “el mundo mundial”; y es por lo que todo o casi todo va mal; ya que si los recursos que hoy hay disponibles, se hubiesen empleado bien, la situación no ser

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