El actor Wesley Snipes debe entregarse voluntariamente el jueves próximo en una prisión federal de Pensilvania para comenzar a cumplir su sentencia de tres años de cárcel por evasión de impuestos.


El protagonista de la trilogía Blade fue hallado culpable en 2008 de tres cargos por el delito menor de no presentar sus declaraciones de impuestos deliberadamente en 1999, 2000 y 2001. Y fue absuelto de otros cinco cargos, incluyendo fraude fiscal y asociación delictuosa.
Desde entonces, el actor de 48 años intentó permanecer libre bajo fianza mientras apelaba su sentencia.

La prisión en la que estará es una institución de seguridad media con una cárcel satélite adyacente para infractores que requieren mínima seguridad.

El mes pasado los abogados de Snipes argumentaron que se debería realizar otro juicio al actor por los testimonios presentados por Kenneth Starr, un ex asesor financiero de celebridades, que admitió en una audiencia en septiembre en Nueva York que engañó a clientes acaudalados y a clientes ancianos por decenas de millones de dólares.

Un juez rechazó ese y otros argumentos, al tiempo que señaló que ''el acusado Snipes tuvo un juicio justo... Ha llegado el momento de implementar lo que se acordó en el juicio''.

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Ustedes se preguntarán ¿Y qué importancia tiene que este tipo vaya preso? Si incluso no me gustan sus películas o los personajes que encarna.

Lo llamativo de esta noticia es que se trata de un actor exitoso, que , a pesar de ser un personaje notorio del mundo del espectáculo, se va a comer tres años de prisión EFECTIVA, nada más y nada menos que POR EVADIR IMPUESTOS.
Pecadillo que aquí se consideraría como una hazaña y le harían un monumento.
Aquí hay asesinos, violadores y ladrones probados, que están libres.
Se juzga a futbolistas, exministros, o personajes de la farándula por delitos mayores y nunca van a la cárcel.

¿Qué cosa no?